Los bancos centrales y la política monetaria
Los cambios en la política monetaria
Comprender cuáles son las expectativas de los mercados respecto a los cambios en la política monetaria (las tasas de interés) es fundamental para entender cómo cotizan los activos financieros en ellos.
- “¿Va a subir la Reserva Federal las tasas de interés?”
- “¿Son posibles nuevas inyecciones de liquidez?”
- “¿Cuándo van a tomar la iniciativa?”
- “¿Hasta cuánto podrían subir las tasas?”
Qué debes tener en cuenta
Las anteriores son las preguntas que traders e inversores deben hacerse. Para el mercado de divisas, la política monetaria es probablemente la información macroeconómica más importante de todas.
Un país tiene fundamentalmente dos vías para gestionar su economía:
- Mediante política fiscal (impuestos y gasto público)
- Mediante política monetaria (fijación de las tasas de interés por parte del banco central).
Aunque la política fiscal puede tener algún impacto en la economía, son los cambios en la política monetaria los que producen alteraciones importantes en los mercados.
¿Qué es la política monetaria?
Tradicionalmente, un banco central (como la Reserva Federal de EE. UU. o el Banco Central Europeo) puede aumentar o reducir sus TASAS de INTERÉS.
Tras la crisis financiera de 2008, las tasas de interés se redujeron en general hasta llegar prácticamente a cero mediante la llamada política de tasas de interés cero o ZIRP, por sus siglas en inglés. Esto produjo la necesidad de emprender medidas de política monetaria no convencionales. Los bancos centrales introdujeron en consecuencia la EXPANSIÓN CUANTITATIVA, mediante la que usan dinero creado electrónicamente para comprar bonos (generalmente deuda soberana). Se trata de una política monetaria diseñada para aumentar el gasto del sector privado e impulsar la inflación.
RECUADRO: Políticas monetarias relajadas o duras
En términos generales, un banco central tiene tres opciones con respecto a la política monetaria. Puede elegir entre:
- RELAJAR: BAJAR las tasas de interés. En los últimos años esta opción ha supuesto el incremento de la expansión cuantitativa en la compra de activos.
- ENDURECER: SUBIR o, en la terminología usada por los bancos centrales, «alzar» las tasas de interés. Esto también puede dar lugar a ajustes o restricciones cuantitativas: los bancos centrales compran bonos que vendieron previamente bajo programas de expansión cuantitativa en un intento de relajar la magnitud de las cifras de sus balances de situación.
- NO CAMBIAR: dicho de otro modo, «plantarse» y no modificar su política monetaria.
Los cambios en la política monetaria pueden tener impactos relevantes en los siguientes aspectos:
Flujos de dinero caliente: las diferencias en las tasas de interés conducen a entradas (cuando suben las tasas) de dinero hacia la moneda nacional o a salidas (cuando las tasas bajan) hacia otras monedas. Esto ocurre porque los traders que operan en los mercados internacionales buscan obtener un beneficio a partir de los diferenciales entre las tasas de interés de los dos países. Un aumento en las tasas de interés suele ser beneficioso para la divisa nacional, porque aumenta su demanda.
Mercados de bonos: debido a que los bonos son una clase de activos de renta fija, los cambios en la tasa de interés modifican también la atracción relativa de los bonos nacionales. Así, un incremento en las tasas de interés hará disminuir la demanda de bonos por el cambio del coste de oportunidad asociado a la tenencia de efectivo sobre los bonos: si el efectivo da más intereses, aumentará su demanda respecto a la de los bonos y, en consecuencia, el precio de los bonos caerá (nota: esto provocará también una subida de su rendimiento, debido a la relación inversa que hay entre este y el precio de los bonos).
¿Por qué es tan importante la política monetaria?
Los bancos centrales tienen en cuenta todos los indicadores económicos de un país para decidir cómo configurar su política monetaria. Sin embargo, algunos son más importantes que otros. Tanto la inflación, como el desempleo y el crecimiento del PIB contribuyen a perfilar las perspectivas económicas del país y, por tanto, la visión de los bancos centrales respecto a dónde se dirige la economía.
Si una economía se está caldeando, los indicadores económicos empezarán a mejorar. Normalmente esto conllevará una mejora del crecimiento, una reducción del desempleo y una inflación incipiente.
El cuento de Ricitos de Oro y los tres ositos nos ofrece una buena analogía del equilibrio que intentan alcanzar los bancos centrales en dichas circunstancias, porque no quieren que la economía se caliente mucho, pero tampoco que esté muy fría. La quieren en su justa temperatura.
Prefieren que la economía mejore, pero sin sobrecalentarse. Por tanto, los bancos centrales intentarán subir las tasas de interés para enfriar así la economía y evitar que se descontrole la inflación.
Ten en cuenta la composición de los comités que deciden la política monetaria
- La composición de los comités del banco central encargados de la política monetaria influirá en las perspectivas que tenga el mercado sobre ella. Los cambios anuales en los derechos de voto (especialmente en el Federal Open Market Committe, o FOMC, de EE. UU.) son monitorizados de cerca por los mercados.
- Los discursos de los responsables del banco central fuera del horario habitual para los anuncios de la institución pueden proporcionar una indicación sobre las opiniones de los miembros votantes en los comités de política monetaria del momento.
- Además, presta atención a cualquier cambio de opinión o posición (especialmente de los miembros con derecho a voto) que pueda influir en las futuras decisiones de política monetaria.
Conclusión: el impacto de la política monetaria
Los cambios en las tasas de interés afectarán a toda una gama de clases de activos. Manteniéndose el resto de variables iguales, un incremento en las tasas de interés debería:
- Reforzar la moneda nacional
- Debilitar los precios de los bonos nacionales y, por tanto, fortalecer sus rendimientos
- Debilitar, potencialmente, las acciones nacionales*
*N.B. Esto no es seguro que ocurra. Las acciones tienden a obtener mejores resultados en entornos laxos de política monetaria, pero un aumento de la tasa de interés podría ser la consecuencia de un intento de normalizarla, después de un período de tasas ultrabajas. También puede interpretarse como un signo de confianza en el entorno económico en el que se desenvuelven las empresas, y de mejores perspectivas de futuro.